Ahora se porque te busco, porque tu también juegas a morirte de repente.
Entró por tus orejas algo indescifrable y yo me deshice cautivada en el aura de los sentidos La vida y la muerte se lavaban los pies en casa de la madre de un colega y yo desvanecía entre sudores y lágrimas me agarré al tren como una niña se agarra a su padre y deja de tener miedo
Quería ser una roca y iba perdiendo cachos de ser humano para que tu pudieras verme indestructible. A ti te veia como un cuenco que escondía un conejo mágico entre tanto se oxidaba el tiempo y pedíamos dinero en las puertas del consumo
viernes, 18 de diciembre de 2009
me araño la cara cada vez que me abandonas y no soy yo es la niña que no entiende que te vayas